domingo, 12 de junio de 2016

Los sabores de la memoria: cheese cake de especuloos y baileys con salsa de café

Especuloos (cortesía de la red)
Cuando se trata de memoria gustativa, el maestro es "Remy". La escena en la que este roedor gourmet nos enseña los fuegos artificiales que una buena combinación de sabores puede despertar en nuestro paladar es espectacular. El lo hace con una fresa y un trozo de queso viejo, pero puede valer para casi todo. A mi me ha pasado, en esta ocasión, en un almuerzo familiar, en los postres, que nos han puesto un helado con especuloos ¿y quién se puede resistir a una de estas galletas?. Habrá sido que el comensal de al lado estaba tomando un cheesecake que mi imaginación ha volado y me he imaginado un cheesecake de especuloos y baileys con salsa de café. En esa película entrañable, "Rataouille", se hace una exposición maravillosa de cómo la imaginación, la memoria y las ganas de hacer disfrutar a los demás hacen de la práctica de la cocina una disciplina inigualable. Yo ya estoy disfrutando con la búsqueda en libros y redes de las pistas necesarias para que el resultado se ajuste a lo que imagino, aunque suelo confiar más en la experiencia y los ajustes de ultima hora para conseguir los mejores resultados. El cheesecake es una de las recetas que más veces me demandan en casa y es de las pocas que he conseguido aprenderme de memoria. Y esta no será la primer versión, ni será la última. Estoy dispuesta a hacer un día un monográfico, aún a riesgo de que mi casa parezca el "Cheesecake Factory" de EEUU. Aunque pensándolo bien.....¿porqué no hacer un Aneyki´s factory?

domingo, 5 de junio de 2016

Día mundial del medioambiente

Veterinarios Sin Fronteras/VETERMON

No es raro que el medioambiente forme parte de nuestra vida. Como tantos conceptos con día internacional, parece que pasan desaparcibidos el resto del año. Desde la existencia de las RRSS y sus "#" todos podemos hacer algo por nuestro día internacional favorito o a conveniencia o para convertirlo en TT. La vida en los pueblos grandes y las ciudades parece que cada día estar más lejos del campo, de los bosques, de las marismas, de las sierras,... y aunque todo lo que promulgan los defensores de la naturaleza va encaminado a salvaguardarlos, no son tantos en los que esta importancia cala. De nuevo, gracias a las RRSS, nos deshacemos de la inquietud de hacer algo por alguien, pero: ¿cuando vamos a compararnos la ultima y más barata camiseta de verano? ¿cuándo decidimos comer naranjas en agosto? ¿cuándo seguimos comprando la carne en las barquitas de plástico?.......¿no son éstos gestos igual de compulsivos que dar a "compartir", "retuitear", "menear",...?. Con un pequeño gesto, un pequeño ahorro o una pequeña reflexión todos podemos hacer algo por el medioambiente, algo que deje huella de verdad, en nuestra economía y en la mundial, sobretodo en la economía medioambiental. Claro, esto siempre que no reflexiones sobre las toneladas de petróleo que se mueven, gastan y queman para que todo esa mercancía esté en nuestras estanterías, las de derechos humanos y de los trabajadores que se vulneran, las de bosques que se queman o los acuíferos que se secan o contaminan. Y no hace falta ser un radical para hacer un pequeño cambio que importe. Las tres erres siguen estando tan vigentes como siempre